A lo largo del tiempo, hemos ido avanzando en tecnología lo cual ha hecho de nuestra vida quizás mucho más fácil de lo que era para nuestros antepasados.
El internet de las cosas es la interconexión digital de objetos cotidianos con el internet y permite el cambio intercambio automático de información con otros dispositivos o centros de control sin intervención humana.
Algunos de los objetos que nos ayudan son: las cafeteras, un automóvil, un cepillo de dientes, una lavadora, un microondas, entre otras cosas. Pero deben contar con sensores, circuitos integrados y conectividad para que les permite recolectar e intercambiar datos, ya sea entre ellos o con internet, para que puedan ser diferenciados de objetos simples.
Estos objetos son conocidos como nodos IoT o dispositivos inteligentes. Son llamados así no solo porque cuentan con internet sino que también por distintas funciones que son muy importantes. Primeramente el monitoreo, ya que a partir de distintos sensores podrán reconocer lo que ocurre al rededor del dispositivo inteligente, siendo capaz de identificar la velocidad, temperatura, altitud, movimiento o cualquier otro elemento que ocurra a su alrededor. Con esto podrá tomar una acción, esto quiere decir que podrá abrir o cerrar una puerta, encender o apagar un dispositivo, etc. Como ejemplo podemos ver las puertas que están en los centros comerciales que al detectar una persona o movimiento a una distancia cercana podrá responder de forma favorable.
Otra de las funciones que emplea es la optimización, ya que a partir del monitoreo y análisis de la información que se ha recolectado, deberán saber utilizar los recursos cuando sean requeridos. La automatización también juega un papel importante ya que es facilitar y retrogradar actividades que son consideradas como rutinarias.
Es impresionante como es que el internet de las cosas ha ido creciendo de una gran manera, se estima que éste nació alrededor del 2008 y 2009.
En el 2003 contábamos con una población de 6,3 mil millones de humanos en el mundo, 500 millones de dispositivos conectados y aproximadamente 0,08 dispositivos conectados por persona.
En el 2010 se estimaba una población mundial de 6,8 mil millones, 12,5 mil millones de dispositivos conectados y 1,84 dispositivos conectados por persona.
En el 2015 contábamos con una población de 7,2 mil millones, 25 mil millones de dispositivos conectados y alrededor de 3,47 dispositivos conectados por persona.
Se estima que para el 2020 estas cifras seguirán aumentando de forma sobrenatural, contando con una población mundial de 7,6 mil millones de personas, 50 mil millones de dispositivos conectados y 6,58 dispositivos por persona.
La Unión Internacional de telecomunicaciones, estima que el internet de las cosas podría ser de gran utilidad para servicios básicos como la educación y salud. Y los siguientes ejemplos nos lo confirman:
Gracias a la aplicación de nuevas tecnologías, están cambiando las formas de enseñar y de aprender.
Muchos de estos cambios vienen de la mano de aplicaciones para smartphones y tablets como las que se crean en Cloud incubator hub. Dando la aplicación como objetivo el mejorar el aprendizaje.
El internet de las cosas puede ser una herramienta que nos de un gran beneficio, siempre y cuando la sepamos usar para cada situación y tiempo adecuado.
En el caso de la educación me agrada mucho la idea que puedan emplearse aplicaciones que serán de ayuda para los estudiantes. También con la ayuda de los smartphones o tablets, podemos llevar una cantidad grande de libros sin tener que batallar al encontrarlos en las librerías, sin ser costosos o andar cargando.
En el ámbito de la salud, el internet de las cosas no se ha quedado atrás, pues en el centro Ochsner en Louisiana, están usando el reloj de Apple y Apple HealthKit, para ayudar a los pacientes en el control de su hipertensión.
Claro que como existen múltiples beneficios gracias al IoT, también existen cosas negativas que pueden llevar a perjudicarnos como:
1- Adicción: El uso constante de las redes, genera adicción a nivel cerebral activando los mismo mecanismos que pone a trabajar cualquier droga adictiva.
2- Estrés 24/7: Ya que nos conectamos a internet terminando la jornada de trabajo o estudio, al despertar es la primera acción, no dejamos relajar el cerebro después de terminar nuestras actividades o al iniciar el día comienzas a trabajar bajo estrés.
3- Aislamiento: Ya que el uso excesivo del internet, puede llevar al aislamiento mientras se tiene ilusión de estar generando conexiones reales con los demás.
Esos son algunos de los riesgos que puede ocasionar, pero sin duda el IoT ha causado grandes avances en casi todos los ámbitos, creo que solo es el saber manejarlos para no salir perjudicados.
https://www.youtube.com/watch?v=gV7l2YOSOQ4
https://www.youtube.com/watch?v=5REvkAbyhRk
https://www.youtube.com/watch?v=5YoHiPrRPU4
https://www.youtube.com/watch?v=Chox5hbCOaU
https://www.cisco.com/c/dam/global/es_mx/solutions/executive/assets/pdf/internet-of-things-iot-ibsg.pdf